Desconecta y reconecta, mis lecciones de inmadurez

Es muy curioso cómo nosotros nos adaptamos a todo tipo de ambientes, personalmente he pasado de vivir la vida acelerada de la ciudad a vivir cómo si cada día fuese una aventura interminable, me aconstumbré tanto hasta que perdí el control de las cosas, y me perdí.

Fue un 18 de Julio, dos días después de mi cumpleaños n° 17, que mi familia y yo teníamos que viajar al campo para afrontar la crisis económica, sanitaria y en sí, los peligros que traían consigo Covid-19, es temporal, regresaré pronto, pensé. Al final fueron casi dos años, me he equivocado y me he divertido, fue una larga travesía que me gustaría contarte.


¿Sabes?, las cosas más bonitas de la vida no se planean. Eso era algo que yo rechazaba todo el tiempo, porque siempre creí que las personas que tienen todo planificado, pueden elegir lo mejor y por ende, le suceden las cosas más bonitas de la vida.

Cuando llegué al campo y nos establecimos en un lugar, no sabía qué hacer, era un momento crucial en mi vida, porque había terminado la educación secundaria, pero previamente había tomado la decisión de retirarme de la universidad, para poder estudiar por mi cuenta, desde casa, de la ciudad. Hacerlo en el campo fue difícil, no había una conexión a internet lo suficientemente rápida como para estudiar (Vídeos) y seguir subiendo contenido a internet, pasaban los meses y me sentía muy mal, no era capaz de tomar una decisión, porque creía que no iba a funcionar, quería hacer tantas cosas, pero me frustraba el hecho de pensar de esa manera, con este problema, viví una vida un tanto diferente, ya no planificaba nada, no era atento al tiempo, solo había una cosa en mi mente, "Regresaré a la ciudad pronto", así que, desconecté.

Se presentaron serios retos, que en su momento no supe cómo afrontarlos, una de las lecciones más grandes que me llevo y me costó mucho darme cuenta, es sobre tomar decisiones, me dí cuenta que no sabía tomar buenas decisiones que respondan al problema de manera rápida y efectiva, porque siempre estaba acostumbrado a que alguien más lo descubriera por mí, yo no me atrevía, y sin duda, mi vida estaba en juego, porque todo lo que más soñaba podía no cumplirse, por el simple hecho de no responder ante los desafíos de la vida, ahora estoy aprendiendo a tomar mejores decisiones para el futuro.

Posiblemente todos fallan en su primer amorío. Yo amo a mi familia, tengo amigos que los quiero muchísimo. Con respecto a aquello, la gran equivocación es forzar algo que no arranca y no lo hará. Era una época muy baja en mi vida, por lo que necesitaba era esforzarme para salir de ahí, no hundirme, mi segunda lección se basa en las relaciones y compromisos, creo que lo más importante de toda persona es su valor, no importa si tiene mucho o poco dinero, si viste a la moda o si sigue las tendencias; conozco gente que lo da todo por tí, y son realmente admirables. Siento que me perdí completamente cuando pusé todo en una persona, me sentía tan mal por lo que me pasaba que quería olvidar, traté de omitir mis responsabilidades con un compromiso que no podía cumplir, simplemente caí. Aprendí que no es bueno poner todo en riesgo y más en algo o alguien que no lo vale.

Felizmente la idea de volver a la ciudad, siempre estaba presente en mis pensamientos, cuando llegó el día de tomar el vuelo, respiré profundamente y dije: "Es momento de volver", eso hice, reconecté.

Mi corazón latía más fuerte, cómo me sentía en casa, mis ojos se iluminaban en el aeropuerto, simplemente era mágico, estaba en casa, aunque en mis pensamientos, seguía recordando que tuve que despedirme de mi mamá, mi pequeña hermana, tíos y mis abuelos, no fue fácil como pensé que sería, pero aquí estoy, tengo que avanzar hacia un mejor mañana.



Comentarios

Entradas populares